jueves, 26 de junio de 2008

Misteriosa muerte (2ª parte)

El inspector Faulkner se fue directo a la casa de Kassandra, la amiga con la que, supuestamente, la víctima iba a dormir la noche pasada. Cuando llegó a la casa la criada le abrió y pasó a la salita donde estaba Kassandra. Ella le invitó a sentarse y el inspector cedió. Seguidamente empezó con el interrogatorio.
-¿Cuando fue la última vez que vio a la Sra. Copeland?
-Ayer, por la mañana, vino y estuvimos charlando un rato. Se acordó de que se había dejado un paquete que tenía que llevar a no se quien y llamó a su criada para que se lo trajera.
-¿Y después?
-Después se marchó-dijo Kassandra- me dijo que tenía muchas cosas que hacer, aunque no me dijo cuales.
-Y entonces se despidieron hasta la noche ¿no?
-¿Hasta la noche? No, ¿por qué dice usted eso?
-Perdone señora, pensé que la Sra. Copeland tenía pensado dormir en su casa.
-No, para nada, o por lo menos a mi no me dijo nada.
-Bien, cambiando de tema, ¿con qué teléfono llamó a su criada para que le trajera el paquete?
-Me pidió si podía llamar a su casa con mi teléfono. Dijo que se había dejado el móvil en su recámara.
-¿Observó algo raro en la señorita?
-Estaba algo nerviosa, pero no me comentó nada. Cuando se dio cuenta de que se había olvidado el paquete se puso muy nerviosa... algo importante debía de contener.
-¿Desea añadir algo mas?
-No... bueno sí, últimamente salía con un señor llamado James Rodson. La verdad, no me daba muy buena espina. Es un señor muy serio, una vez le oí como gritaba a Bryanna, la decía algo así como que lo había estropeado todo, que no tenía que haberse metido donde no le llaman. Ese señor siempre me miraba mal... hay algo en él que no me termina de convencer.
-Muchas gracias, señorita, cualquier cosa que quiera usted contarme sabe donde llamarme.
El jefe de policía salió de la casa de Kassandra y se metió en el coche. Cuando fue a arrancar el coche alguien le llamó por el móvil. Faulkner lo cogió y se oyó un largo silencio hasta que al fin alguien susurró:
-Quien se mete donde no le llaman sabe lo que le espera...
Al inspector no le dio tiempo a decir nada, pues antes de nada la persona que le llamó colgó. Había usado un distorsionador de voz para que no le reconociera. Faulkner sabía que quien le llamó era el asesino, pero le sorprendió que le llamara a él. Seguidamente, el jefe de policía se dirigió a la comisaría donde consultó donde podría encontrar a James Rodson. Cuando Faulkner llegó al apartamento de Rodson, una mujer le indicó que no se encontraba en casa, que estaba en el trabajo.
-¿En qué trabaja el Sr. Rodson?- preguntó.
-Trabaja de camarero en el bar de la plaza mayor, al lado del banco.
-¿Y usted es?
-Me llamo Amelia.
-¿Qué es lo que le une al Sr. Rodson?
-Esto -la señora enseñó la mano al inspector señalándole el anillo- soy su mujer, ¿qué es lo que ha hecho ahora ese pedazo de alcornoque? -preguntó con tono enfadado.
-Que se sepa nada, estamos investigando la muerte de Bryanna Copeland ¿la conoce?
-Por supuesto que la conozco, esa señora me quería quitar a mi marido, se creía que por tener dinero podía poseer todo lo que quisiera. ¡Menuda quita maridos estaba hecha!
-¿Donde estaba a las 10 en punto de la pasada noche?
-En mi casa con mis hijos, ellos mismos te lo pueden decir.
-No hace falta señora, ¿y su marido?
-Imagino que en el trabajo.
-Muy bien, señora, buenos días.
Faulkner fue en su coche al bar donde trabajaba Rodson. Cuando entró, preguntó por él y le comunicaron que ya no trabajaba en ese sitio, tras una pelea con uno de los clientes hacía dos semanas. Preguntó en donde le podían encontrar y le dijeron que le habían visto "trabajar" jugando en un casino todos los días, a dos calles de allí. El inspector dio las gracias y se fue directo al casino. Allí preguntó si le conocían y uno de los trabajadores del casino le llevó hasta él. Rodson tenía los brazos tatuados con serpientes y el pelo largo. Llevaba un chaleco baquero y los pantalones rotos. Faulkner le enseñó la placa.
-Estamos investigando la muerte de la Sra. Copeland, ¿la conocía?
-¿Cómo muerte? ¿cuando? No lo sabía... claro que la conocía.
-Murió anoche a las 10.
-¿Cómo que a las 10? Si yo la vi a las 11 y media de la noche
-¿Está seguro de que era ella?
-Si claro, la vi por la calle, llevaba una paquete en la mano. La noté muy nerviosa, me dijo que tenía prisa y se fue corriendo.
-Qué extraño... el cuerpo fue encontrado a las 11, en el puerto. ¿Dónde la vio?
-Iba en dirección contraria al puerto.
-¿Recuerda qué llevaba puesto?
-Llevaba un traje rosa, con falda y chaqueta y un bolso negro.
-Por ahora no hay mas preguntas, gracias.
Faulkner pensó que al hablar con Rodson podría sacar alguna conclusión, pero salió del casino mas confundido. Cuando llegó a la comisaría, empezó a pensar: La víctima llevaba un pantalón negro y una camiseta amarilla. Es posible que estemos en un caso de gemelas, pero el Sr. Copeland no mencionó nada de que la víctima tuviera una hermana gemela...

jueves, 19 de junio de 2008

Tiempos mejores

Al fin vienen tiempos mejores y se han pasado los momentos de estrés y sofocones ¡menos mal! Ya tendré mas tiempo para postear y dentro de poco os pondré la segunda parte del post anterior. De momento, y aprovechando este tiempo que tengo, os pongo la canción nueva a la que me he enganchado. Muchos besos y abrazos a todos.